
Me he sorprendido mirándola en sus detalles arquitectónicos hechos con los materiales que había en medio de la desolación del paisaje en que se alza. Adobes, piedra, madera --restada probablemente al calor de sus habitates en esos fríos que congelan muchas veces hasta las ideas -- y el material intangible pero más importante: el increíble amor a Dios de sus constructores y del clero que las atendió.
Pensemos que son iglesias coloniales, casi seguramente fundadas por sacerdotes de congregaciones que llegaron con los conquistadores, pero en este caso no para hacerse la América precisamente, sino para servir a los indios, sus hermanos recién convertidos o en vías de hacerlo.

Valga como homenaje. Que en paz descansen junto a Dios, rodeados de los que se salvaron por su apostolado.

Iglesia de Isluga
8 comentarios:
Cierto es un lugar para recuperar, aunque sea en forma lenta, vale la pena, cuanto trabajo pasarían los misioneros, lindas imágenes
Saludos!!!
hola amiga mia, perdona mi ausencia, estoy preparando algo, te avisare a su tiempo.
bendiciones
Que buena tu entrada... hace un tiempo tuve la oportunidad de estar en Arica e Iquique y admirar en vivo y en directo la arquitectura de estos templos centenarios ya... claro que fueron misioneros infatigables los que crearon comunidades que hasta hoy celebran sus fiestas llenas de baile y colorido. Si te interesa el tema, puedes empezar a preguntar por el padre Amador Soto, que en Arica realiza una misión itinerante junto a otros jóvenes sacerdotes y seminaristas, muy sacrificado por cierto. Bendiciones.
Me alegro de que se reparen esas joyas de adobe, paja y amor. Son mudos testigos de una entrega que se ve poco.
ups!!! juraría que había dejado una nota acá... Bendiciones.
¡Qué lindas! ¡Gracias!
¡Qué bonito! ¡Quién pudiera visitarlo!
Amigos: por una jugarreta de mi amado Blogger, no había visto sus comentarios, pero ya se ha arreglado. Uds. no saben de dónde me han traído de regreso, pues he tenido la tentación de abandonar este blog, pero ya veo que lo que he dicho de ser necesarios acá vale. Junto con los comentarios a esta entrada, me ha llegado uno entrañable a una anterior sobre mi conversión. Si lo hubiera borrado, no serían posibles estas cosas.
Un abrazo a c/u con mi gratitud.
Publicar un comentario