16 septiembre, 2006

Mortificación cristiana, religiosa y de la otra



Si se habla de "mortificación cristiana" es seguro que deberemos dar explicaciones y no es raro que además no nos crean o nos pongan a los católicos dentro de las patologías de los locos de atar: hoy casi no se entiende y se piensa que es propio de nosotros, del Opus Dei u otras órdenes y congregaciones escasas o en extinción.

Pocos piensan que son expresiones de todas las culturas y como ejemplo se me vienen a la cabeza el Ramadán de los musulmanes, tatuajes rituales, ayuno judío en el acápite religioso, pues ¿qué me dicen de las mortificaciones deportivas, como horas en los gimnasios, continencia sexual por "concentración" antes de un partido importante, y muchas más?
En la sección imagen, ¿qué tal la anorexia obligada para mantener los huesos flacos de las modelos, políticos, gente de negocios y artistas?

No, se entiende poco o nada la mortificación cristiana, la tachan de secretismo, pero ¿qué podemos hacer si el Maestro así nos lo enseñó? Hasta su claro instructivo que podemos leer en
san Mateo (6, 1 y siguientes) la mortificación de Israel, por tomar un modelo, era ostentosa, y Jesús lo cambia para siempre. Desde ahora será sólo para ser vista "por tu Padre que está en lo secreto". El mismo Señor estuvo en el desierto haciendo dura penitencia corporal en forma privada. ¿Qué le queda al que desee seguirlo por ese legítimo camino?

La mortificación voluntaria no se limita a sufrir por razones religiosas u otros motivos en el cuerpo, también son muy importates la limosna, el servicio al prójimo, y en general la caridad que conlleva una negación de si mismo, pues no creo ni por cinco segundos que a las monjas de la madre Teresa de Calcuta "les guste" limpiar llagas, o lidiar con niños idiotas, o cortar uñas sucias, etc. No, lo hacen calladas por amor a Dios, pero ¿ eso es mortificación? ¡vaya que lo es!

Si al hacer el bien buscáramos "ser aprobados por los hombres" habríamos perdido nuestra recompensa eterna por ese acto pues ya la obtuvimos en la tierra, dice el Señor.

No, no lo escodemos como cosa de iniciados esotéricos, sino por un amor más perfecto al ser ignorado por los hombres, pero en la era de la imagen, de mostrar la intimidad y todo globalmente, es difícil de comprender.

Pies de la Madre Teresa de Calcuta

20 comentarios:

San Blog dijo...

Amiga, me dejas sumido en el silencio de la oración. Qué profundidad con la que escribes. Se siente tu experiencia del Señor y tu amor a la Iglesia.

Me hacen tanto bien tus escritos. Son medicina para el alma.
Gracias.

Qué el Señor te siga bendiciendo abundantemente.

Luis Fuertes dijo...

Siempre he pensado que la vida ordinaria está llena de pequeñas mortificaciones que se hacen por los demás, para hacerles más felices, sin que se den cuenta. Ese es el caso de las negaciones dentro del matrimonio pensando en el otro cónyuge, de los desvelos de unos padres por sus hijos, de la ayuda desinteresada de un amigo, ... Pero estamos en una sociedad en la que es políticamente más correcto perforarse el cuerpo por doquier con "piercing" que el amor a la Cruz, que el retraso en beber un vaso de agua, que una sonrisa en vez de una cara de palo o que un rato de cilicio. Gran paradoja.
Gracias por tu comentario de hoy, tan acertado y preciso como siempre.

Aeronauta dijo...

Es complicado este tema, como otros muchos que un mundo secularizado no está capacitado para comprender.

Se me vienen las palabras del Señor: "...el que tenga oídos para oír, que oiga..." No todos pueden _o quieren_ oír lo que hay detrás de la mortificación silenciosa, escondida libre y personal, dentro de límites racionales que no expongan la salud ni del cuerpo ni de la psiquis, que sería una contradicción grande con el espíritu del 5º mandamiento: "No matarás".
Cada cosa en su lugar y proporción, ¿no?

Saludos y gracias por hacerme saber que ayudo en algo.

Aeronauta dijo...

Hablando de mortificaciones bastante aceptadas , extendidas y más peligrosas, pero no cristianas, acabo de leer ésto a propósito de un desfile de modas en Inglaterra:
(...) La pasarela madrileña, que también comienza este lunes, ha decidido rechazar al 30 por ciento de las modelos que desfilaron en la pasada edición por no ceñirse a los nuevos parámetros que marcados por expertos nutricionistas para ofrecer una imagen saludable.
(...)
"Las chicas aspiran a parecerse a las modelos de las pasarelas. Cuando esas modelos están por debajo del peso normal de una forma enfermiza, eso presiona a las adolescentes a pasar hambre para tener un aspecto similar", dijo la ministra británica en un comunicado este sábado.

También las asociaciones británicas de anorexia y bulimia y los expertos nutricionistas han instado a la Semana de la Moda de Londres a imponer criterios similares a los establecidos en Madrid, que exigen, por ejemplo, que una modelo que mide 1,75 metros pese al menos 56 kilos.
El portavoz de la Asociación de Trastornos Alimenticios, Steve Bloomfield, consideró la medida adoptada por Cibeles de "positiva y útil" para proteger no sólo a los profesionales de la moda, sino a las personas con riesgo de sufrir enfermedades como la bulimia o la anorexia y que pueden verse influidas por las imágenes que ven."


Ésto no lo ha propiciado nunca el cristianismo que yo sepa.

Cristian dijo...

Aeronauta:
Que quieres que te diga, me has dejado sin palabras. Que facilidad para actualizar un tema tan poco valorado hoy. Los ejemplos, clarísimos. Realmente te inspiraste en el Espíritu para este post. Bendiciones.

Mara dijo...

Que razón tienes al decir que la mortificación no se limita a sufrir por razones religiosas.Esa es la clave, la mortificación no es solo sufrir por sufrir, eso sería de tontos ( como mínimo) la mortificación es mucho más es cargar con la Cruz que cargo el Señor o ayudarle a llevarla como el Cirineo, y no hace falta irse al congo, basta con sonreir a ese compañero de trabajo, o hacerle un favor a un vecino o estar pendiente de tu madre, pequeños detalles con un gran valor.

Luis Fuertes dijo...

Estoy de acuerdo contigo en que este tema es un poco complicado de entender, sobre todo para quien no tiene ni siquiera la intención de comprender a los demás.
Personalmente, creo que las pequeñas mortificaciones se distinguen de otros actos "no cristianos" (que pudiéramos llamar sacrificios) en que se hacen pensando en los demás, mientras que los "sacrificios" se realizan pensando en uno mismo.
Gracias de nuevo.

Semilla dijo...

Es un tema difícil... solo para valientes, solo para los que en verdad enloquecen de amor por Jesucristo...
"Toma tu cruz y sígueme" decía el Maestro, en otras palabras "no le temas al camino de la muerte". A cada uno El le da la cruz que puede cargar, según sus fuerzas, según su fortaleza de espíritu.
Uf! En verdad es un temazo! da para mucho.
Esto es solo para ti... no lo publiques: Respecto a Germán: Te pido que por favor respetes su decisión... su blog tenia un propósito que... "ya no existe" por explicarlo de alguna forma. Además, ahora tiene mucho trabajo y más ganas que nunca de trabajar a full, porque está enamorado... de mí. ¿No lo habías notado?... Bueno estamos juntos (pololeando) hace un mes, y felices.
Eso... CARIÑOS ;D

Anónimo dijo...

Es un tema difícil... solo para valientes, solo para los que en verdad enloquecen de amor por Jesucristo...
"Toma tu cruz y sígueme" decía el Maestro, en otras palabras "no le temas al camino de la muerte". A cada uno El le da la cruz que puede cargar, según sus fuerzas, según su fortaleza de espíritu.
Uf! En verdad es un temazo! da para mucho....

hna. josefina dijo...

¡Es verdad! A veces nos mortificamos tanto para cosas no importantes, y ¡cómo nos cuesta cuando sí vale realmente la pena!
Contradicciones misteriosas de nuestra pequeña vida cotidiana...

Anónimo dijo...

Muy apropiadamente, la antífona de comunión de ayer era ésta: "Qui vult venire post me, abneget semetipsum: et tollat crucem suam, et sequatur me. (Escuchar)" Esto es la mortificación: abneget semetipsum, niéguese a sí mismo. Este es el orden que ha puesto el Señor: antes de tomar la cruz y seguirle, hemos de morir: que si hemos muerto con Cristo, creemos que con Él también viviremos. (Cf. Rom. 6,8)

"Esa palabra acertada, el chiste que no salió de tu boca; la sonrisa amable para quien te molesta; aquel silencio ante la acusación injusta; tu bondadosa conversación con los cargantes y los inoportunos; el pasar por alto cada día, a las personas que conviven contigo, un detalle y otro fastidiosos e impertinentes... Esto, con perseverancia, sí que es sólida mortificación interior." (San Josemaría Escrivá: Camino, 173)

alida dijo...

Gracias por tu paso y tus palabras en mi blog
Lindo blog son gotitas para el alma

Aeronauta dijo...

Amigo anónimo Me gustaría saber tu nombre o nick, algo para recordarte....por temor o por ofensas, hay muchos anónimos en los blogs católicos. Yo los comprendo, Dios lo sabe bien....

He oído tu música, es muy bella. Primera vez que me mandan algo así acá :)

Saludos y muy bueno ese texto de "Camino" de San Josemaría. Es exacto para este comentario. Gracias de nuevo.

Alma dijo...

Pueden etiquetarnos con un sello de loco,
pero esa locura es poder de Dios y más
cuando le dedicamos nuestro propio dolor
a su gloria.

DTB

Natho47 dijo...

Las ortificaciones de la gente común me impactan en demasía,allí hay verdadera santidad,otras son poses.

Aeronauta dijo...

Querido y ocupado doctor Contreras:
Hay quienes hacen aparatosas mortificaciones SÓLO en Lo Vásquez, el 8 de diciembre, por poner un ejemplo, y el resto del año se olvidan en general de muchas cosas sencilas que valen una montaña, como sonreír como dice Estarjo al qu evive a tu lado, etc. pero de valer VALE. No somos Dios para leer los corazones.
Yo prefiero la mortificación callada, oculta, constante,sin reconocimiento ni recompensa en este mundo, como Nuestro Señor enseñó. También vale una montaña, pues los dones de la cultura, sensibilidad, etc están repartidos en forma diferente y no se nos pide a todos igual.
Otra cosa muy chocante debe ser ver llegar al servicio de urgencia a un tipo todo ensangrentado "por mortificación" cuando lo que ha hecho es un acto de borracho puro y simple en un día feriado religioso por copiar, incluso sentir, pero lo remito a mi primer párrrafo, sólo UN día y lo podrían hacer mejor.
Saludos, Doctor. Es un honor su paso acá.

Cristian dijo...

Lo Vasquez???
Yo pertenezco al equipo central de esa fiesta. Allí por desgracia no se puede educar sobre este tema. La fe de la gente sencilla, se niega a abandonar la mortificación por ese par de horas al día, una vez al año. Hay de todo...

Cristian dijo...

Lo Vasquez???
Yo pertenezco al equipo central de esa fiesta. Allí por desgracia no se puede educar sobre este tema. La fe de la gente sencilla, se niega a abandonar la mortificación por ese par de horas al día, una vez al año. Hay de todo...

Aeronauta dijo...

Sí, P. Cristián, en Lo Vásquez y en la Tirana y en muchas partes, Pertenece al acervo cultural-religioso y yo lo respeto, pero no podemos negar que suele ser aparatoso y generalmente UN día al año, sea del santo que sea.

En la tierra de mis padres es San Senbastián y las mandas se pagan de muchos modos duros para la sensibilidad actual, pero lea lo que dije :) VALEN. Dios quizás a esas personas les pedirá menos cuentas que a nosotros que tenemos otros dones, y no somos nadie para juzgarlos.

Saludos y ¡no se enoje que sus fieles, parroquia y Lo Vásquez son lo máximo!
Bendíganos a todos acá, ¿ya? de verdad lo necesitamos.

Con permiso..soy Lulú dijo...

TOC-toc, permiso:
Me tocó este trozo de San Lucas hoy en la Misa:

¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros realizados entre ustedes, hace tiempo que se habrían convertido, poniéndose cilicio y sentándose sobre ceniza.
Por eso Tiro y Sidón, en el día del Juicio, serán tratadas menos rigurosamente que ustedes.

Hoy, primer viernes del mes, dedicado al Sagrado Corazón, aparte de las maravillas que hace cada día por aquí, ¿no dan ganas de desagraviar? No quisiera oír esas palabras del Señor aplicadas a nosotros. ¿cierto? entonces......

Saludos